Juan Bautista Charlone |
Por: Roberto Antonio Lizarazu
Al escribir en este sitio los comentarios sobre Estanislao del Campo-Anastasio El Pollo y Otra Travesura de Anastasio El Pollo publicados en fecha viernes 30 de marzo ppdo. reparé en lo avaro que había sido al referirme en las observaciones, sobre uno de los versos de Parte del General Vencido, cuando Anastasio el Pollo escribe la legión de italianos. Escuetamente aclaré: Era la que comandaba Juan Bautista Charlone, compuesta en su gran mayoría por curtidos veteranos de origen itálico, y de gran efectividad en batalla.
En realidad esta Legión de italianos, cuyo verdadera denominación era Legión Valiente, tenía a la fecha de Pavón el 17 de septiembre de 1861, un par de lustros de antigüedad y su actuación había sido más que destacada en la lucha en defensa de la frontera sur de la provincia de Buenos Aires y en los enfrentamientos de nuestra conformación nacional. Alguno puede criticar políticamente de que lado le hubiese agradado que se encontrase la Legión Valiente , pero nadie puede decir ni media palabra de la bravura ni de lo heroico de sus acciones en batalla.
Es verdad que en Pavón, como menciona Anastasio el Pollo, fueron comandados por Juan Bautista Charlone, también de origen italiano, pero la Legión Valiente tiene comienzo en 1852.
El 11 de septiembre de 1852 se produce en Buenos Aires una revolución, o si la observáramos detenidamente podríamos definirla como contrarrevolución, con ramificaciones en Córdoba, y en Mendoza contra el Director Provisorio de la Confederación Argentina , Justo José de Urquiza. Éste había abandonado Buenos Aires para concurrir a Santa Fe para dejar inauguradas las deliberaciones del Congreso General Constituyente, y los contrarrevolucionarios aprovecharon la oportunidad para su intento. El General Hilario Lagos (1806-1860) del Partido Federal pro rosista, con muchos ex integrantes de la Sociedad Popular Restauradora de la misma Buenos Aires y al mando de tropas provenientes del sur de la provincia de Buenos Aires; y algunas partidas cordobesas, intenta derrocar al Director Provisorio Urquiza.
Tanto Ciríaco Cuitiño como Leandro Antonio Alén fueron apresados y fusilados en oportunidad de este golpe, no después de Monte Caseros, pues habían estado prófugos desde la Batalla de Monte Caseros en febrero de 1852.
Durante este enfrentamiento y sitio de Buenos Aires, se produjo la batalla de San Gregorio el 22 de enero de 1853, entre el Coronel Pedro Rosas y Belgrano por parte de los sitiados y los Comandantes Gregorio Paz y Juan Francisco Olmos que eran lugartenientes de Hilario Lagos, quienes prodigaron a Rosas y Belgrano una categórica derrota.
Es en estas circunstancias donde nace la Legión Italiana de Buenos Aires, y sus integrantes comandados por el Coronel Silvino Olivieri con el objetivo de colaborar en la defensa de Buenos Aires ante el ataque de Hilario Lagos. El Coronel Silvino Olivieri, militar italiano nacido en Abruzos, es un carbonario que aparece en estas playas como exiliado de la monarquía de los Saboya. Para 1855 Olivieri fue nombrado comandante de la Legión Agrícola Militar, que era una organización de soldados y colonos de origen italiano. Como resultado de este proyecto nace la Colonia Nueva Roma, que se convierte con el paso de los años en la localidad Nueva Roma, ubicada unos pocos kilómetros al norte de Bahía Blanca.
Tanto la Legión Italiana de Buenos Aires (1852) como la Legión Agrícola Militar (1855) fueron los antecedentes de los batallones mencionados por Anastasio El Pollo como Legión de italianos.
Para 1880 todo esto había pasado a la historia. En 1853 la Legión Italiana de Buenos Aires es disuelta cuando finaliza el sitio de Hilario Lagos.
Además Olivieri (carbonario separatista) tiene sus propias aspiraciones. Pretendía una autonomía política de la Colonia respecto de Buenos Aires. De hecho se manejó de manera totalmente independiente y muchas veces arbitraria; sin responder a ningún poder ni provincial ni nacional.
En octubre de 1856 se produce un incidente que colma la paciencia de las autoridades nacionales. Olivieri arrestó a 16 Sargentos de la Legión ; 10 italianos del norte y 6 argentinos, acusándolos de querer desertar y robarse la caballada. Decidido a ejecutarlos a todos, viajó a la actual Bahía Blanca (ya estaba fundada desde 1828 como Fortaleza Protectora Argentina) a buscar al capellán de la Legión para que les prestase asistencia espiritual antes de la ejecución. En el momento de su llegada, los soldados destacados en la Fortaleza Protectora Argentina se rebelan y pusieron en libertad a los 16 presos. Gresca general y Olivieri fue degollado en la refriega. Unos días después también muere de gangrena el Capellán que había quedado herido en los incidentes.
Finalmente, la Colonia Nueva Roma se disuelve. Los civiles italianos del norte y del sur, juntamente con los argentinos, fueron trasladados a la actual Bahía Blanca. Los militares argentinos incorporados a las tropas de línea de la frontera sur y gran parte de los militares italianos terminaron incorporándose a la ya mencionada Legión Italiana de Buenos Aires; y participaron en Cepeda y en Pavón.
Como ya mencionamos para 1880 todo este proceso Legionario pasa a la Historia. Es verdad que también existieron cuerpos de legionarios españoles, pero eso es para otra oportunidad (1). Julio Argentino Roca en su primera presidencia (1880-1886) encarga a su Ministro de Guerra y Marina Benjamín Victorica una reorganización de las fuerzas armadas, donde entre otras medidas todos estos cuerpos legionarios son institucionalmente abolidos.
Fuentes: José Oscar Frigerio. Epopeya y Tragedia del Coronel Silvino Olivieri. Austral, 1996.
Miguel Ángel De Marco. La Patria , Los Hombres y el Coraje. Historias de la Argentina heroica. Planeta, Buenos Aires, 1998.
(1) Además de los cuerpos de legionarios españoles, unas décadas antes en 1830, se organizaron cuerpos militares franceses, que se denominaron “Los Amigos del Orden”, en ocasión del ataque naval a Buenos Aires al mando del vizconde de Venancourt. A ambos temas ya les llegará su turno.
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