La publicación de estos apuntes sobre Historia Argentina, no tienen otra pretensión que prestar ayuda, tanto a estudiantes como a profesores de la materia en cuestión.

Muchos de ellos, simplemente son los apuntes confeccionados por el suscripto, para servir como ayuda memoria en las respectivas clases de los distintos temas que expusiera durante mi práctica en el Profesorado. Me daría por muy satisfecho si sirvieran a otras personas para ese objetivo.

Al finalizar cada apunte, o en el transcurso del mismo texto se puede encontrar la bibliografía correspondiente a los diferentes aspectos mencionados.

Al margen de ello invitaremos a personas que compartan esta metodología, a sumarse con nuevos apuntes de Historia Argentina.




Profesor Roberto Antonio Lizarazu

roberto.lizarazu@hotmail.com



viernes, 30 de marzo de 2012




Estanislao del Campo


OTRA TRAVESURA DE ANASTASIO EL POLLO


Por: Roberto Antonio Lizarazu
Continuando con Estanislao del Campo, y su personaje Anastasio El Pollo,  me voy a permitir presentarles este inusual caso referido a El Pollo, que por sus extrañas características, considero  merece ser divulgado.        

Estanislao del Campo había participado como combatiente en Cepeda (1859) y en Pavón el 17 de septiembre de 1861. En esta última participa con el grado de Capitán del primer batallón del Regimiento Nº 4,  bajo la órdenes del doctor  Adolfo Alsina, quién con el grado de Coronel comandaba  la denominada Brigada Autonomista, que dependía de la Guardia Nacional de Buenos Aires dirigida por  Mitre. En la vereda opuesta se encontraban Santiago Derqui, presidente de la Confederación Argentina y Urquiza como Comandante de esas fuerzas. Como sabemos cuando la suerte de la batalla estaba lejos de definirse, inexplicablemente  Urquiza se retira hacia Entre Ríos con su Estado Mayor y con el grueso de la caballería entrerriana, dejando el triunfo en manos de Mitre y su bando.

Estanislao del Campo, que queda del lado de los vencedores, escribe en versos gauchescos una obra muy poco conocida: “Parte del General Vencido”, que se lo dedica a Derqui. A su vez, escribe otra versión sin firmar, figurando como autor anónimo, con el objeto de entretener a la tropa. Esta segunda versión  se encontraba hasta hace unos años en el archivo de la colección privada de documentos  del doctor Isidoro J. Ruiz Moreno. Por supuesto yo jamás tuve oportunidad de leerla. Tengo conocimiento de algunos privilegiados colegas   que pudieron leerla, pero no copiarla porque estaba prohibido por su propietario.  Es muy zafada y  llena de malas palabras con giros de doble sentido, que se usaban en ese momento y adecuados para una ronda de fogón, pero de ninguna manera  para ser reproducidos en este portal.

Simplemente Estanislao del Campo hizo con su Parte del General Vencido, la maniobra comúnmente denominada como La Gran Aristóteles. Una versión exotérica para el gran público y otra versión esotérica para leerse en los fogones de su regimiento de la Brigada Autonomista.

Tengo mis serias dudas que Estanislao del Campo hubiese estado orgulloso de ser el autor de esa segunda obra, porque no  la firmó, y ni siquiera la firmó como Anastasio El Pollo, pero que fue el padre de la criatura, en su época nunca hubo la menor duda, y por lo que tengo entendido nunca nadie puso, hasta ahora, en duda quien es el autor de esos versos anónimos.  Fue Estanislao del Campo.
Si reproduciré  algunos pocos versos  de la versión que podríamos llamar normal, que es la que se publicó con la firma de Anastasio El Pollo y que guarda la típica forma gauchesca que inmortalizó a su autor.
El Parte del General Vencido comienza con la explicación que Urquiza le
hace a Derqui de su retirada a Entre Ríos.

Triste es señor presidente
Para el que firma esta nota
Dar cuenta de la derrota
Descomunal de Pavón.
Y más que triste,  horroroso
Tener que participarle
Que pronto van a quitarle
Banda, elástico y bastón.


Sepa, señor presidente,
Que el tal Mitre es un gran zorro
Que me ha hecho apretar el gorro
Como a un milico vulgar
Y abra el ojo que le queda
Sin despreciar la advertencia
Y de gracias Vuecelencia
Si se lo puede apretar.


Luego de estas explicaciones de Urquiza a Derqui,  que es más extensa, Anastasio El Pollo, describe los prolegómenos de la batalla en sí, y continúa con la modalidad de que Urquiza siga informando a Derqui.

Me dijeron que como un buitre
Se viene volando Mitre
Sin pararse a descansar.


Y ya salté a mi caballo,
Y ya hice atar mis cañones,
Y ya escaloné escuadrones
Y ya empecé a proclamar,
Y ya tendí mis guerrillas.
Y ya puse las baterías,
Y ya hice las punterías,
Y ya hice un ala avanzar,
Y ya di la orden de degüello,
Y ya saqué a la luz mi espada
Y ya vi a la porteñada
Y ya me empecé a asustar.


Pero en este mismo instante
Los salvajes batallones
Debajo de mis cañones
Vinieron a desplegar;
Casi todos guante blanco
Riéndose y fumando habanos
Y una legión de italianos
Imposible de aguantar.


La famosa infantería
Que trajo de La Tablada
No
me ha servido de nada

Más bien de estorbo, señor;
Y en cuanto a la artillería
Del infeliz de mi yerno
Puede también irse al cuerno
Porque no he visto cosa peor.


Le aseguro a Vuecelencia
Que el batallón Rosa Guerra,
Pudo conquistar su tierra,
Si así sus infantes son.
Y que esas mismas niñitas,
Según es mi artillería,
Pueden venir cualquier día
Y no dejarme un cañón.


Los porteños y extranjeros,
Que para vestir sus tropas
Por poco no les dan ropas
De terciopelo y tisú,
¿No reirán como unos locos
Al ver a esa mascarada
Bonetuda y colorada
Por las calles del Perú?


Observaciones

Y abra el ojo que le queda. Es una burla a Derqui, cuyo mote era: El Tuerto.

Del infeliz de mi yerno. El yerno de Urquiza era el Coronel Simón Santa Cruz, hijo del Gran Mariscal de Zepita, Andrés Santa Cruz, quien había sido presidente de la Confederación Peruano- Boliviana y que tantos inconvenientes trajera con su enfrentamiento a la Confederación Argentina, durante el segundo  gobierno de Rosas.

Que para vestir sus tropas.  Los batallones porteños, incluido el de Estanislao del Campo, habían sido uniformados con ropa adquirida de sobrantes de la Guerra de Crimea, con unos mamelucos  y bonetes colorinches usados por las tropas otomanas. Anastasio El Pollo, se burla de si mismo.

Por las calles del Perú.  Se refiere a la calle Perú.

La legión de italianos. Era la que comandaba Juan Bautista Charlone, compuesta en su gran mayoría por curtidos veteranos de origen itálico, y de gran efectividad en batalla.

Que el batallón Rosa Guerra. Está referido a la escuela de señoritas de la notable educadora y poetisa Rosa Guerra, autora de la obra Clemencia de 1862 y considerada la primera autora teatral de nuestro país.
Finalmente el Parte del General Vencido, termina con unos consejos a Derqui, como despedida. Los últimos versos  de esos consejos son:

Y en tanto aproveche el tiempo
En preparar su maleta
Sin olvidar la limeta
Y diez panes de jabón.
Aunque sea de miedoso
Para el agua como un gato
Zambúllase como un pato
Y atraviese el Paraná.


Que aunque no embolse millones
Lo primero es la existencia.
Adiós pues, querido amigo
Y compadre presidente,
Dios lo saque felizmente
De entre este berenjenal,
Y eleve el presente parte,
Aunque sea un sacrificio,
Con el consiguiente oficio
Al Congreso Nacional.

Fuente: Historia de la Literatura Argentina. Los Gauchescos. II, Estanislao del Campo. Kraft, 1957.





No hay comentarios:

Publicar un comentario